
Hace 20 años que entraste en mi casa. Era verano y nos llamaron por teléfono diciendo que te habían traído de Venezuela y nos estabas esperando. Tenías 7 mesecillos y estabas todavía echando las primeras plumas de tu verde plumaje. 20 años con nosotros, con tus. “Hola Currito bonito, hooolaaaa”. 20 años silbándonos, 20 años disfrutando cada vez que te dábamos un trocito de queso. 20 años acercando la cabecita a mi mano para que te arrascara, bañándote en el bebedero cuando hacía calor. ¿Te acuerdas cuando yo estudiaba en la universidad? Me quedaba a estudiar en el cuarto mientras tú dormías, me mirabas de lado y susurrabas, no te atrevías a hablar en alto para no molestarme. Y yo siempre decía lo mismo: “Mira que es listo el puñetero loro que sabe cuando no tiene que molestar”. Han sido 20 años donde muchas veces con tus Brrrrrrrrrr me crispabas los nervios, y con tus besitos me hacías reír.
Me acuerdo todavía cuando murió Sansón, ese gato que tanta compañía nos hacía en casa y que tantas perrerias, o mejor dicho lorerias le hacías. ¿Te acuerdas que cuando pasaba por debajo de tu jaula agachaba las orejas y el rabo por que se las mordías si se descuidaba? Él jamás intentó cazarte, jamás intentó arañarte y eso que estabas suelto en casa y de vez en cuando cuando él dormía en el sillón te ponías sobre el y le dabas mordisquitos. Me acuerdo el día que murió que estuviste una semana entera buscándole por la casa. Te metías debajo de los cojines, por detras de los sillones, haciendo ruiditos por que no le encontrabas. ¿Lo recuerdas?
Este mes estabas de vacaciones en Ávila, en casa de mi sobrinillo. Él te estaba mimando desde hace un mes y de repente te has puesto malito. Me han llamado por teléfono, llorando para decirme que no podías respirar, que te habías caído al suelo de tu preciosa jaula y no reaccionabas. Han ido corriendo por el veterinario pero no ha podido hacer nada. Hoy Curro, hoy nos has dejado y no estaba junto a ti, no estaba acariciándote la cabeza ni dándote un poco de yogur que tanto te gustaba. Hoy Curro te has ido, y aquí estoy yo, llorando tu partida, sin poder hablar. Curro, vuela, vuela alto y allá donde vayas cada vez que digas: Hooolaaa Currito bonito, yo en mi corazón te escuchare, que es donde has estado estos 20 años de mi vida.
Aish........ lo siento mucho!!! :(
Un besote bien gordo guapa!!!