Otro accidente aéreo. Esta semana no levanto cabeza. Desde la crisis de ansiedad de hace unos días llevo estoy muy triste, no levanto cabeza y me vienen muchos recuerdos. Hoy mientras me estaba vistiendo para ir a trabajar, mi madre tenía la televisión puesta y he escuchado la noticia. No he querido verla, no he querido que todas las imágenes que hace unos días vinieron a mi mente volvieran a atormentarme otra vez. El horror que estas personas han sufrido me atormenta a mi, y noto opresión en los pulmones y en el corazón solo de pensarlo. Sé que ha habido muertos, por el titular de la noticia en el periódico, pero no he querido leer la noticia al completo, no me atrevo.
Solo pido un silencio, un respeto por sus vidas perdidas, y una enhorabuena a aquellos que han vuelto a nacer. En esta ocasión el piloto no pudo salvarles, pero seguramente fue un héroe como el mío, o como el de Canadá, seguro que hizo todo lo posible por salvarles. Un minuto de silencio por respeto, un minuto de silencio para que no vuelva a ocurrir.

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