Ayer por la noche tuve que ponerme a prueba. Salí de casa cuando ya había anochecido, y me dirigí al coche. Pasé por delante de su portal y me dirigí a la gasolinera donde habíamos comprado las últimas coca colas. Tomé rumbó hasta aquella calle y aparqué el coche en el mismo sitio que aquel fatídico día. Apagué el motor, salí y me senté en un banco, enfrente, de noche, a solas, arropada por la luna llena. Lloré, tres horas llorando, tres horas mirando hacia mi coche desde fuera, intentando ver lo que pasó aquel día desde otro punto de vista. Lloré intentando imaginarnos a los dos, allí solos, él abandonándome y yo aturdida. Lloré intentando ver a través del cristal del coche, intentando ver que las cosas según desde el cristal donde se miren son diferentes, pero no veía la diferencia. Estuve tres horas mirando hacia el coche, con la luz de la luna reflejada en mis lágrimas. No me atrevía a entrar en él, me daba miedo sentarme y volver a recordar la conversación, las palabras de despedida: “Ósea, esto significa que me estás dejando”…”Como pareja, sí”.
Intenté recordar toda la conversación y sacarle un sentido. Intenté entender sus razones y sus porqués, intenté ver su punto de vista y darme cuenta de que si lo decidió así, es por que realmente sería lo mejor para mi y no tendría que estar triste, pero no lo logré. No siento que haya sido lo mejor, ni la mejor solución. Creo que si se hubiera hecho de otra manera, seguramente hubiéramos encontrado otras vías para no llegar tan repentinamente a esta drástica decisión.
Necesitaba ponerme a prueba. Necesitaba confirmar que la frialdad con la que estaba actuando, que el temple que estaba teniendo hasta ahora, no era ficticio, era real, y que sí lo estaba superando. Pero no, no es real, todo es ficticio, no soy fría, no tengo ningún muro levantado ante mi, sigo con los mismos sentimientos. Siento haberme defraudado a mi misma, no haber luchado y conseguido mantener a mi lado algo que realmente merecía la pena, siento haberle dejado escapar por alguna razón entre mis dedos, como agua, me siento vacía, me siento mal, me siento sola. Le necesito a mi lado.
Pi!!!!Anda que me tienes contento!!!A veces estamos preparados para algo,pero...no se puede hacer una cosa para la que no estamos preparados,hay que ir pasito a pasito joerrrr,un besote.